El 10 de diciembre, se celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos, en conmemoración de la adopción, por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de la Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptada en París el 10 de diciembre de 1948 por resolución 217 con 48 votos a favor y 8 abstenciones. A través de esta Declaración, los países firmantes acordaron las libertades y derechos que merecen protección universal para que todas las personas vivan en libertad, con igualdad y dignidad y fue la base para la adopción de los Pactos Internacionales de Derechos Civiles y Políticos y de Derechos Económicos Sociales y Culturales.
En ese mismo año, 1948, se había adoptado, también, y en ocasión de la IX Conferencia Internacional Americana en Bogotá, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, siendo el punto de partida para el desarrollo del sistema interamericano de promoción y protección de los derechos humanos.
Pero 1948 fue, también, escenario de la adopción y apertura a firma por parte de los Estados, de la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio por resolución 260 de la Asamblea General de Naciones Unidas, reunida en París el 9 de diciembre de 1948, que entró en vigor en 1951, convirtiéndose en el primer tratado de protección de derechos humanos, que reconoce competencia internacional para que los Estados cumplan con las obligaciones de prevenir la destrucción total o parcial de un grupo nacional, étnico, racial o religioso.
Esos textos se han convertido en parte de nuestra propia Constitución Nacional desde la reforma de 1994, que ha incorporado en el art. 75 inc. 22 como ley suprema de la Nación, once instrumentos internacionales de derechos humanos que enumera taxativamente, previendo, además, que mediante un procedimiento especial, otros tratados de derechos humanos puedan alcanzar jerarquía constitucional.
Al cumplirse el 70 aniversario de la adopción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y de la firma de la Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, recordamos que desde el retorno de la Democracia en el año 1983 la promoción y protección de los derechos humanos es una política de estado y un eje central de la política exterior argentina.